Tuesday, May 30, 2006

Toque de queda en Kabul tras las violentas protestas contra EEUU

Las autoridades afganas han impuesto el toque de queda en Kabul tras los violentos disturbios que causaron la muerte de 14 personas, después de un accidente de tráfico en el que estuvo implicado un vehículo militar de EEUU.

A la vez, el Gobierno títere afgano ha pedido a los habitantes de Kabul que eviten las concentraciones públicas, según anunció la cadena de televisión estatal.

En un mensaje televisado, el presidente títere afgano pro-estadounidense, Hamid Karzai, advirtió de que tomará "medidas serias" contra los responsables de los disturbios ocurridos ayer en Kabul, en los que murieron al menos catorce personas y resultaron heridas casi 150.

Las protestas se iniciaron ayer por la mañana después de que un vehículo militar norteamericano se viera envuelto en un accidente de tráfico, en el que murió una persona y resultaron heridas otras seis, según dijo e una portavoz de la coalición, teniente Tamara Lawrence.

Al parecer, los militares de ocupación estadounidenses golpearon con su vehículo varios coches de civiles para abrirse paso y, tras quedar bloqueado en la carretera al chocar contra tres utilitarios, decenas de afganos les rodearon y comenzaron a protestar contra ellos, a lo que estos respondieron abriendo fuego contra la muchedumbre.

El incidente, tuvo lugar en el distrito de Sarai Shamali, en el norte de la capital, a la que el vehículo militar viajaba desde Bagran, principal base militar de EEUU en Afganistán. El vehículo de EEUU logró salir del lugar y la policía afgana llegó a la zona, donde ya había un gran número de gente que protestaba contra las tropas norteamericanas.

Escalada de furia

La policía abrió fuego contra los manifestantes, lo que causó heridas al menos a 20 personas que fueron trasladadas a hospitales de la capital afgana, lo que no impidió que los disturbios continuaran y se extendieran a lo largo y ancho de la ciudad.

Al menos 14 personas murieron y casi 150 resultaron heridas en estos disturbios, los más graves ocurridos en la capital afgana desde la entrada de las tropas extranjeras y la caída del régimen talibán a finales del 2001.

La policía y fuerzas militares cargaron contra cientos de manifestantes que marchaban por las calles de la capital afgana al grito de consignas como 'Muerte a Estados Unidos', 'Muerte a Karzai' y 'Muerte a la policía'.

Los manifestantes, algunos de los cuales llevaban palos, saquearon y prendieron fuego a una oficina de la organización no gubernamental CARE International, además de quemar multitud de vehículos y tiendas, puestos de la policía, cuatro unidades móviles de la cadena de televisión Ariana TV y el lujoso hotel Serena.

Muchos de los manifestantes se concentraron frente al Palacio Presidencial y también frente a la Embajada de EEUU, donde fueron dispersados con disparos al aire de la Policía. Las protestas también se dirigieron a la sede del Parlamento afgano, contra la que muchos manifestantes lanzaron piedras, al igual que contra varios edificios de alrededor.

AGENCIAS/EFE

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